sábado, 12 de enero de 2008

Tarde pero muy tarde… (pero libre)


Yo se que ya estoy fuera de tiempo y que el año nuevo fue hace ya un buen rato, pero… ¿quién carajos les dijo que tenemos el monopolio del año nuevo?

Para muestra tengo los siguientes datos:

Para los chinos el Año Nuevo Chino no puede ser convertido a una fecha exacta del calendario gregoriano y puede ocurrir entre el 21 de enero o el 21 de febrero.

El pueblo judío lleva otra cuenta, ya que no coincide con el mismo calendario y tampoco toman como referencia el a.C. y d.C. Celebran su año nuevo con el “Rosh-hashanáh” y cae dentro del mes de septiembre o comienzo de octubre.

Algunos radicales ortodoxos celebran el 14 de enero al mantener el calendario juliano.

La celebración del Año Nuevo Vietnamita, celebrado junto al Año Nuevo Chino.

El Año Nuevo Islámico se celebra el 1 de Muharram, aproximadamente fines de enero e inicios de febrero.

La celebración del Año Nuevo Tibetano se celebra entre enero y marzo.

La celebración del Año Nuevo Iraní es para el equinoccio vernal, el 21 de marzo.

También la celebración del Bahaísmo se da en el equinoccio vernal, el 21 de marzo.

En Tailandia, Camboya, Birmania y Bengala se celebra entre el 13 y 15 de abril.

Celebración del Año Nuevo Mapuche es el 24 de julio.

Celebración del Año Nuevo Inca, el 24 de julio.

Celebración del Año Nuevo Judío es generalmente en septiembre.

Celebración del Año Nuevo Etíope, el 11 de septiembre.

Fuente: http://www.esmas.com/noticierostelevisa/investigaciones/592969.html consultada el 12 de enero de 2008 a las 16:46 hrs.


Bueno hecha esta aclaración, y justificando mi flojera de escribir el 31 o 1 de enero (y tardarme casi quince días) quiero decirles que me he pasado muy buenas fiestas en compañía de la gente que más estimo.

Todo fue completo hubo comida, bebida (hasta el hartazgo) y sobre todo la esperanza de seguir en algo nuevo.

Mi año nuevo comienza hoy, hoy que es un día especial, que logro hacer lo que quiero y estoy más tranquilo y libre de muchas cosas que me mantenían atado.

Pero basta de cursilería barata, simplemente escribo esto para desahogarme y platicar un rato de mi sentir.

Por lo que también es necesario decir que a pesar de que todo en este país sube de precio, de enterarme de que el quetzal es más fuerte que nuestro peso, de que los políticos son la misma mierda de siempre. A mi me queda sentarme, escribir y reírme, que se quejen los pendejos, yo sigo aquí trabajando tranquilo jactándome de mi libertad recién ganada.

¡Feliz año nuevo al 45% de la población que festeja el 31 de enero¡

2 comentarios:

Celestina Tercioipelo dijo...

La libertad, dicen por ahí, no tiene precio. Yo también me siento como si me hubieran quitado una piedra de Pípila de la espalda. Bendito sea dios.

Enrique dijo...

Hey¡¡ que hay hermano siempre es un placer leer tus reflexiones, chingón que empecemos el año con vibra chida, y mas si empiezas proyectos nuevos.
saludos