lunes, 3 de diciembre de 2007

Un descubrimiento II


Un archivo más de momentos "poéticos"

Escribir, oír, no se, quizás vender una idea, por lo menos estar atento

Una mirada, un sorbo al café, escuchar una pieza sentimental o que construya

imperios de barro, guerras sucias, mentiras y más mentiras.

Que más da, ahora recuerdo algo

Yo sentado mirándote, admirándote en verdad pretendiendo ser un poeta.

La música se acaba, la ira me mata, o más bien, me mató

pero en un instante:

el beso a mi alma resucitó mi ego, terminó con el sufrimiento,

el calor de la estrella de mis encanto quemó mis más fríos sentimientos,

incendió mi alma a más de lo que un hombre puede soportar

infinito amor sentí por escuchar aquella canción de lluvia.

Ahora que me veo, en un oscuro cuarto a la luz de la vela(no pagué la cuenta)

mirando la hoja en blanco esperando que por la noche lleguen las letras

listas para ser plasmadas en el papel que encontré tirado a lado de mi pie.

Pero… me doy cuenta que no es así, pues debo pensar en algo o más o más bien en ti

y pensando en ti, me ilumino mi noche, aunque no pague o no me paguen para pagar

y pues digo basta, pues esto no tiene sentido, por que tu… tu ya no estas aquí

y ni siquiera estarás por que mi nombre olvidarás y yo te recordé por que no tengo luz.

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