El consentido(a) de la maestra, una figura polémica en muchos aspectos, odiado, repudiado y casi lapidado por sus compañeros de salón o, inclusive, del colegio. Pero, ¿cómo detectar a un rastrero infeliz consentido de la maestra(o)?.
Para empezar, no por el hecho de que simpaticen con un maestros(a) o se tenga buena relación quiera decir que sea un consentido(a). Dicho personaje, influye en las decisiones del profe perjudicando a los demás, su calificación es superior no por mérito académico sino por mérito de ser un lame botas. Siempre está de chismoso(a), nunca tiene amigos, no son muy brillantes por lo tanto sus padres les hacen los trabajos que, normalmente, opacan a los que si se esfuerzan.
La semana pasada me reuní con un viejo amigo de la primaria, y comentábamos (como siempre se hace cuando se ven amigos del estudio) sobre anécdotas escolares.
Recordamos a la consentida, una niña alta no muy agraciada, que durante su estancia en la primaria se dedicó a desempeñar el puesto para beneplácito de las maestras y repudio de nosotros. Una anécdota que recordamos, fue la investigación por equipos de un fruta. Dicho trabajo debía ser acompañado con una mermelada y una exposición explicando las conclusiones. Nosotros elegimos el mango.
Todos llevamos trabajos buenos para ser alumnos de primaria, sin embargo, ella, llegó con una exposición digna de una feria dedicada a la piña. Tepache, disfraces de piña, dulces, fotografías enormes, una exposición detallada y, por supuesto, la mermelada. Nuestro equipo llevó tres cartulinas, pan de Goiti y un kilo de mermelada.
Todos sacamos una calificación aprobatoria, sin embargo, la felicitación, la algarabía, los elogios y la atención fue para la chismosa y barbera consentida de la maestra. Saludos a la consentida de la maestra, tengo entendido que sigue en las mismas, es decir, ahora no es la maestra, sino el patrón o jefe.
Para empezar, no por el hecho de que simpaticen con un maestros(a) o se tenga buena relación quiera decir que sea un consentido(a). Dicho personaje, influye en las decisiones del profe perjudicando a los demás, su calificación es superior no por mérito académico sino por mérito de ser un lame botas. Siempre está de chismoso(a), nunca tiene amigos, no son muy brillantes por lo tanto sus padres les hacen los trabajos que, normalmente, opacan a los que si se esfuerzan.
La semana pasada me reuní con un viejo amigo de la primaria, y comentábamos (como siempre se hace cuando se ven amigos del estudio) sobre anécdotas escolares.
Recordamos a la consentida, una niña alta no muy agraciada, que durante su estancia en la primaria se dedicó a desempeñar el puesto para beneplácito de las maestras y repudio de nosotros. Una anécdota que recordamos, fue la investigación por equipos de un fruta. Dicho trabajo debía ser acompañado con una mermelada y una exposición explicando las conclusiones. Nosotros elegimos el mango.
Todos llevamos trabajos buenos para ser alumnos de primaria, sin embargo, ella, llegó con una exposición digna de una feria dedicada a la piña. Tepache, disfraces de piña, dulces, fotografías enormes, una exposición detallada y, por supuesto, la mermelada. Nuestro equipo llevó tres cartulinas, pan de Goiti y un kilo de mermelada.
Todos sacamos una calificación aprobatoria, sin embargo, la felicitación, la algarabía, los elogios y la atención fue para la chismosa y barbera consentida de la maestra. Saludos a la consentida de la maestra, tengo entendido que sigue en las mismas, es decir, ahora no es la maestra, sino el patrón o jefe.
7 comentarios:
Como docente puedo dar testimonio y decirte q no en todos los casos es tal cual como vos lo planteas.
Por experiencia personal t cuento que en la esc. primaria era de esas a la cual la docente recien se daba cuenta q existía a fines de octubre.
Hoy q estoy del otro lado soy la preferida de la dire(mi jefa).
Estoy convencida de que el que rie último, rie mejor. jajajaja
Efectivamente no se da en todos los casos.
Esa docente que se daba cuenta de tu existencia hasta octubre está bárbaro jajaja.
Saludos
rayos... se me revolvio el estomago.. describiste a una compañera de aquellos años... creo que lejos de agradarnos.. los mastros (algunos) hacen todo lo posible para crear esas aversiones entre nosotros...
puras piñas barberas!
La "piña" de mi grupo era hija de la presidenta de la asociación de padres de familia. Toda la primaria ella siempre tenía las mejores notas y mejor lugar que yo. En alguna ocasión la maestra admitió el favoritismo en una charla con mi madre y en la secundaria que ya no estabamos en el mismo grupo, en plena ceremonia de premiación, la directora me dijo "qué bueno que ahora no hubo chanchullo con @@@@@". Hoy es ama de casa y seguramente será presidenta de la asociación de padres de la escuela de sus hijos...
Como te dije antes, ahora que estoy del otro lado y pase las que pase me tomo revancha.
Cuando tengo que poner al abanderado siempre elijo al que tiene peores notas pero la lucha día a día para mejorar.
Los que tienen muy buenas notas y son chupamedias de la maestra me caen muy mal.
Yo era consentida, pero nunca chismosa. ¿No jugué bien mi papel? jejeje
En la escuela se les llama "consentidos", pero cuando crecen y trabajan, sus compañeros los nombran "esquiroles" por que solo les interesa quedar bien con el patrón y no les importa difamar a los demás con tal de quedar bien ell@s...
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