miércoles, 16 de abril de 2008

Karaoke (el invento de un frustrado cantante)


En mi cuarto hay un dvd con dos entradas para micrófonos, mismo que hacen las veces de karaoke. Y es por eso que toda mi familia y amigos se reúnen para cantar.

El sistema de cantante amateur, no discrimina ni siquiera a Martín Urieta o “el Chacarrón” de Sinaloa, pero llega a ser un peligro cuando algunos se ensañan y evitan a toda costa ceder el micrófono; pues resulta ser una catarsis que ni un psicoanalista puede lograr.

El folclor del karaoke es donde se muestra el verdadero sentimiento. Ejemplos claros de sentimientos fuertes son Lupe D´lessio, Paquita, José Alfredo, José José y otros más que son de cortarse las venas con galletas Marías.

Durante una noche, somos testigos de algo indescriptible y un poco aterrador, sobre todo cuando cantan “mudanzas”, “cheque en blanco”, “gavilán paloma” o “te solté la rienda”.

Lo maravilloso del aparato, es que la gente canta sin pensar en la hora, dedicando “rata de dos patas” a quien mejor le convenga y por lo menos en una noche es un laureado artista, perdón Hartista.

Lo malo del aparato es que cuando hay monopolio no existe poder humano que pueda parar la avalancha de ira, felicidad y uno simplemente calla y escucha los gritos de “!hoy voy a cambiar¡” o “!me estás oyendo inútil.

A final de cuentas, el karaoke es un buen invento que un frustrado cantante nos regaló y será parte de las fiestas hasta que salga algo mejor.

8 comentarios:

K dijo...

y esas cosas sirven más cuando te dicen "el 452 (antro de Uruapan donde milagrosamente me dejan entrar) no tiene cupo para 40 más" (familia grande) y tenemos qué quedarnos en casa, una bola de gente sin qué hacer y un DVD con entrada para micrófonos, qué mejor!
tras un destile de bebidas varias sobre la mesa, cantas porque cantas... o te obligan a hacerlo; simplemente es genial, divertido, y te otorga la oportunidad de burlarte del projimo porque está hasta atrás y nadie entiende lo que "canta"
¡Buen invento de un mal cantante!

Sue dijo...

¡Claro!, la catarsis del karaoke aunque en mi caso prefieron la catarsis extrema, esa que incluye cantar karaoke en un sitio p�blico lleno de desconocidos =P

¡Saludos!

Neto Citadino dijo...

Con desconocidos es más difícil me da como que pena.

Jo dijo...

a veces un microfono libera o te hace estupido.

confieso que no me se las de paquita... pero en la parte de los insultos .. me salen como letania jajaja

Neto Citadino dijo...

Los insultos de paquita son otro nivel.

Celestina Tercioipelo dijo...

Híjole Neto Citadino, tú no te imaginas lo amigos que somos el karaoke y yo. Y las de la D'alessio son mis favoritas, carajo. Qué miedo.

Anónimo dijo...

No cabe duda que este invento del hombre blanco puede ser tan divertido como frustrante para personas como yo quienes le pediríamos unas clases al mismísimo maestro Martín Urieta. En fin, creo que funge como aparato de diversión en toda buena reunión, ahora que, si hablamos de las tertulias, ahí si no me responsabilizo de las consecuencias.

Simón

yorkperry dijo...

jajajaja nada se compara a hacer el ridículo en público volviendo aberrante una canción que quieres mucho