martes, 6 de mayo de 2008

Bailar ¿yo?


Una vez me dijo mi querida madre que cuando uno sale a una disco (antro hoy en día) si uno no baila está tomando. Puedo estar de acuerdo en un porcentaje, pero… que pasa cuando uno no sabe bailar.

Debo confesar que yo nunca he podido hacerlo, en los festivales de la primaria era el más regañado, me decían “no le metes esfuerzo”, “que mal bailas”, “¿así quieres a tu madre?” y una gran lista de comentarios duros y al hocico.

Es una cuestión casi genética o podría decir impedimento crónico que me impide mover mi cuerpo a un ritmo determinado; es una maldición que me atormenta. Una vez me quisieron sacar a bailar (si, me quisieron sacar a bailar) y contesté que no sabía agitar el bote. Estaba en primero de secundaria y la chava era la más guapa o de las más guapas del salón y todos los novatos querían por lo menos platicar con ella; ¡porca miseria¡.

Desde esa vez quise aprender hacerlo, y, a escondidas de la gente, me ponía a “bailar” hasta que un día caí pero, para no azotar, tomé la llave del lavabo y causó un acuático accidente que concluyó la danza clandesitina en litros y litros de vergüenza (para colmo había familia de vistita).

Dado al accidente trágico, mejor me dediqué a no bailar, pero resulta ser que la prepa te obliga a las fiestas y yo “bailaba” y, obvio, la gente me veía con cierta acidez pues el ritmo de mi cuerpo tenía menos gracia que un zombie y por eso prefería sentarme a tomar puras aguas negras del imperialismo.

Muchas mujeres se han atrevido a sacarme pero termino sentado de nuevo porque soy un caso perdido. Mi hermana me dice “!suelta las manos¡” o “¡suéltate más!” pero pareciera que estoy programado para no bailar.

Mi propósito del año 2008 era bailar, pero, hasta la fecha, sigo sin poder ser rítmico aunque cabe aclarar que ahora si me atrevo a “bailar” y ya no me importa lo que digan los demás.

Con mi pasito que me saca de apuros me pongo a moverme, pero… me gustaría aprender a tener más ritmo, digo, para no estar tomando mientras están bailando o con el mismo pasito todo el tiempo.

No se que depare el futuro, tal vez me ponga con el tapetito y el dance dance revolution; quizás tenga más suerte.

9 comentarios:

Cynthia Ramírez dijo...

Y, unas clasesitas de baile? (nadie tiene porqué enterarse)

Porque lo cierto es que en lugares en los que sólo se baila (salsa, cumbias, etc) y la música es taaan ruidosa y guapachosa, es de las poquísimas veces en que bailador, mata buen conversador...

Neto Citadino dijo...

Totalmente de acuerdo con esa tesis del bailador, las clases serán una buena opción.

Unknown dijo...

Yo me uno a tu club de los no bailadores, tal vez en mi caso sea porque nunca lo intente de corazón. Como buen rockero no me intereso mucho en mi vida eso de bailar salsas, cumbias, etcétera. Tal vez, algún día lo intente con ganas.

Sue dijo...

Quizás podrías empezar bailando salsa... hay clases en el salón Veracruz y son buenas y divertidas y uno va aprendiendo de a poco con gente que también está aprendiendo; así que nadie te juzga =P

Lola dijo...

anda a una escuela!! o a un profesor!!! es mas facil aprender con alguien profesional q además sabe cómo enseñar!!!
gracias por pasar !!!!
Lola

K dijo...

no es por desanimar gente, pero eso del dance dance revolution no sirve, lo he usado desde que tenía 6 años, y aun no veo resultados, también tengo mi típico pasito que la hace de todo. Lo único que he podido bailar es a caballo dorado, y sólo una vez no pise a algun cristiano, siempre termino sin gente cerca...
unas clases no son mala idea, o si? puede probarlo, eso ayuda, salsa, por ejemplo.

Anónimo dijo...

Hermano que no le preocupe el hecho de no bailar de hecho creo que no es asi como aprender a bailar mas bien creo que es el ritmo y como lo sientas, me parece muy bien que ya no te importe el hecho de que las demas personas te vean con acidez, si dejas que te moleste el que diran, y veras que tomas el ritmo de cualquier tipo de musica la disfrutas y BAILAS.

Saludos

Gaal Dornick dijo...

Neeeelllll!!!!

(iba a poner un comentariotototote pero mejor los posteo en mi cuchitril)

Saludos Neto

Carlos Avila dijo...

Hace algunos años, por insistencia de mi novia, fui a clases de baile de salón, de 9 a 12 los domingos. Después de la primera hora de la primera clase, me salí para nunca regresar.
Ella hoy es maestra de bailes y va a congresos de salsa (WTF?) y yo mejor me casé con una que se interesó más en mi cabeza que en mis pies...