domingo, 18 de mayo de 2008

Lluvia, muchas gracias



La tarde está gris, y el viento sopla débilmente. El sol se oculta en el horizonte acostumbrado después de un cálido día de mayo. Las sombras del oriente se expanden por fin y la lluvia amenaza una noche fresca y húmeda.

Apago la luz y salgo al balcón para esperar a la lluvia. Cada gota es un recuerdo que caen en mi memoria; momentos de gran interés, besos, abrazos, juegos, niñez, adolescencia, tristeza, felicidad, melancolía y música mucha música adecuada para los lluviosos días.

Las tardes no son iguales, son un viaje inocente en la memoria reprimida por el irritante calor.

Las tardes de lluvia, siempre serán bienvenidas.

6 comentarios:

yorkperry dijo...

man... sigues borracho verdad?

jajaja es broma

Neto Citadino dijo...

Qué pasó muchacho, no hay nada no he chocado
jajajjaa

yorkperry dijo...

ouch! touché!

yo no choqué... este fin de semana =-p

Neto Citadino dijo...

jajaja, aguas con la próxima

La Rumu dijo...

definitivamente, todo depende del cristal con q se mira... a mí me tocó esa lluvia en el ajusco, y no fue precisamente una apacible tarde de lluvia... Saludos ;-)

Neto Citadino dijo...

Si comprendo, en mi natal Guadalajara, las lluvias no son cuestiones románticas, el chiste es estar en casa o un lugar seguro.